O comúnmente llamada lluvia de ideas, así comenzamos con la sesión para dar una solución a la aula de usos múltiples.
Para ello nos pudimos reunir físicamente el equipo formado por dos profesores, el administrador del centro y el jefe de estudios de secundaria, no éramos muchos pero creo que suficientes para aportar ideas. Buscamos un espacio inspirador, no tenemos muchos en el colegio, pero yo como profesor de tecnología, les invite al taller. Esta bastante iluminado, tenemos una pizarra de rotuladores, un panel de corcho donde pinchar o pegar los post-it y para ayudar nos trajimos cada uno su portátil. La sesión se fijó en una hora, ya que coincidir en nuestro horarios los cuatro junto era un poco complicado. Como nos dice el curso nos abastecimos de papel, rotuladores y demás material. Yo expuse la idea, ¿Como conseguir que el aula de usos múltiples tenga un uso racional, y además sea un espacio atractivo donde trabajar en grupos, y funcional para otras tareas?
Ellos previamente ya habían recibido por mail, la cuestión y el planteamiento para esta primera sesión. Así que empezamos, durante unos 15 , teníamos que ir escribiendo lo que se nos ocurría, para todos no resultó igual de sencillo, ya que unos están más o menos acostumbrados a este tipo de trabajo y otros no. Así que pasamos a las relaciones forzadas. Pasamos utilizamos un martillo como elemento de paso, cada vez que uno tenía el martillo tenia que hablar sobre una idea diferente. Esto hizo que la sesión se acelerara. Luego pasamos a dejar nuestras ideas sobre el corcho y de allí a concretarlas sobre la pìzarra. Finalmente elegimos dos propuestas, sobre las que volvimos a hablar, creando una lista de pros y contras, y así se nos pasó nuestra primera sesión.
No fue mal del todo. para ser nuestra primera vez. Vimos que funcionó. Así que registramos lo acordado en un documentos se que guarda para la próxima vez.
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